Presentación

Actualmente me encuentro a unos días de cumplir la veintena y, la verdad, siento que estoy en ese punto en el que cuando pasen seis o siete años seguiré pensando que tengo solo veinte. ¿No es curioso? Lo normal es que hasta esta edad la gente quiera ser mayor y más mayor, y de repente, puf. Se frena la prisa. 

Desde que tengo uso de razón he amado la música y a pesar de intentar entrar en el conservatorio a los nueve años (sí, nueve, lo sé) he preferido estar al margen de la enseñanza musical reglada por miedo a cogerle asco y por encerrarme en la idea de la que creía que sería mi profesión perfecta, la psicología. Afortunadamente me dí cuenta hace exactamente cuatro años de que me había estado engañando desde la más tierna infancia, y decidí salir del charco y meterme en el grado elemental de violín, abrigada sólo por mi título de bachillerato y con la friolera cifra de doce futuros años de estudios musicales. 

Tormentas y arco iris a parte, he decidido crear este blog para mostrar lo que es mi gran pasión: las bandas sonoras; y también para compartir mis humildes creaciones inspiradas en esos grandes compositores que son John Williams, Hans Zimmer, el recién fallecido James Horner, Ennio Morricone, James Newton Howard, Alexandre Desplat...

Si eres de esos locos que van con el Shazam buscando títulos de canciones que suenan por cualquier lado, tienes tu móvil, pc o reproductor lleno de ese tipo de música que no sabrías clasificar y amenazas a tus amigos para que te pasen esa canción que te ha gustado, has venido al lugar correcto. Yo te comprendo y comparto tu inquietud de engrosar nuestra colección musical.

Así que, antes de empezar, ¿por qué no sumergirnos en la alegre mentira del sueño de nuestro amigo Truman con Philip Glass?